empanadillas de manzana caramelizada

Ingredientes:

• 1 paquete de empanadillas
• 2-3 manzanas reineta o golden
• aceite de girasol, la cantidad necesaria para una fritura
• una nuez de mantequilla
• azúcar moreno
• canela en polvo

Elaboración:

1. Pelamos las manzanas y les quitamos el corazón con el descorazonador. Si no tenéis podéis partirlas a la mitad, incluso en cuartos, para quitarles las simientes. Yo lo he hecho así porque he creído que al ser las obleas redondas quedaría más bonito, pero realmente da lo mismo, porque también podemos hacer las empanadillas con la manzana partida a la mitad y después doblar la oblea. Hacerlo según vuestro criterio, porque esta parte no es más que ornamental, no cambia en nada la receta, que es tan sencilla que no sé si merece el nombre. Pero os garantizo que están riquísimas y es una merienda para los niños rápida, con fruta y deliciosa!!!
2. Hay que partir la manzana en rodajas. El grosor sería como para una tortilla de patata, ya que no deben ser muy gorditas para que se hagan, ni muy finas porque se nos romperían, y las queremos enteras.
3.  En una sartén ponemos la mantequilla a fuego lento, y cuando se derrita vamos colocando las láminas de manzana lo justo para completar el fondo. En la parte de arriba espolvoreamos azúcar y canela cuando se haya dorado la parte que toca la sartén. Les damos la vuelta con cuidado y dejamos que caramelice. Continuamos hasta que terminemos con todas las láminas de manzana y dejamos que enfríe. Por qué, pues para que al colocarlas sobre las obleas no se ablanden, y podamos freirlas perfectamente. Si necesitáis más mantequilla, añadirla antes de poner las manzanas y dejar que se derrita. Siempre a fuego bajito, porque la mantequilla tiende a quemarse rápidamente.
4. Ahora vamos a hacer una fritura, que no es ni más ni menos que freir en abundante aceite, Hay gente que piensa que la comida hecha así coge mucha grasa, y nada más lejos de la realidad. Está comprobado que la fritura o la gran fritura, que es en freidoras, queda menos grasa que la hecha con poquito aceite. Sólo debemos tener la frecaución de tenerla a buena temperatura, es decir que cuando echemos el alimento que vayamos a freir a la sartén, el aceite empiece a tener humo, no demasiado, porque se quemaría, pero sí un poco. De esta forma conseguimos que el alimento, en este caso las obleas hagan una capa protectora que impide que siga absorbiendo aceite, o cualquier otra grasa. De cualquier forma al sacarlas conviene colocarlas un ratito sobre papel de cocina, para que absorba el aceite sobrante.
5. Bueno, pues cuando ya tengamos la manzana fría, vamos colocándola sobre una oblea. Podemos poner dos o tres láminas, dependiendo del grosor. Encima colocamos otra oblea y pegamos el borde con un poco de agua, simplemente rozando con la punta de los dedos o un picel, será suficiente. Apretamos con el dedo o un tenedor para que quede más bonito, y vamos friendo. Yo os recomiendo que lo vayáis haciendo según las tengáis rellenas, porque si se rellenan todas y luego empezamos a freir, puede que la parte de abajo se ablande. 
6. Tener cuidado con el aceite, deben quedar doradas, no hace falta hacerlas más, ya que tenemos nuestra manzana cocida.
7. Sacarlas sobre papel de cocina como hemos dicho, y las váis colocando en una fuente para servir, espolvoreadas con azúcar moreno y canela.

Nota: Es una elaboración sencillísima como habréis comprobado. Es que soy de las que piensan que para comer algo rico no hace falta estar dos horas en la cocina. Y ésta es una pequeña demostración. 
Otra nota: Se pueden rellenar con otras frutas, por ejemplo pera, piña... queda riquísimo, o melocotón. Cualquier fruta que acepte un rehogadito. También se pueden hacer con mermeladas,  está realmente rico!!!