Ingredientes
Masa:
- 110 g. de harina de todo uso, tamizada
- 2 c.c. de impulsor químico
- 1/2 c.c. de bicarbonato
- 1/2 c.c. de sal
- 2 c.s. de azúcar
- 6 c.s de mantequilla fría
- 1 huevo L
- 20 cl. de suero de leche, lo que los americanos llaman 'buttermilk'
- 2 c.s. de zumo de naranja
- 1/2 c.c. de extracto de vainilla
- 1/4 c.c de extracto de almendra o licor de almendras amargas
- 1/2 taza de almendra crudas, cortadas en cuadraditos pequeños
Glaseado:
- 2 c.s. de zumo de naranja
- 1/2 c.s. de ralladura de naranja
- 100 g. de azúcar glass, o lo que necesitemos para hacer una glasa espesita
- almendras picadas, opcional
Suero de leche:
20 cl. de leche
zumo de medio limón
Elaboración:
- Precalentar el horno a 180ºC.
- Por un lado, ponemos todos los ingredientes secos en un bol: la harina tamizada, la sal, el azúcar, el impulsor químico, el bicarbonato y la ralladura de naranja. Y añadimos la mantequilla fría cortada en cuadraditos pequeños, mezclando con los dedos, sin amasar, para no darle calor, hasta que consigamos una mezcla arenosa.
- En otro bol, unimos, el resto de los ingredientes: el huevo, el suero de leche, los extractos de vainilla y almendra -o el licor- y los mezclamos bien. Volcamos la mezcla de huevo a los ingredientes secos y los mezclamos bien. Quedará una mezcla pegajosa pero suave.
- Esparcimos harina en la mesa de trabajo, y volcamos la masa. Añadimos más harina por la superficie y la amasamos un poco, hasta que se empiece a despegar de las mano. Esta forma de terminar una masa es muy buena, porque así sólo añadimos lo que necesitamos, sin tener que hacer exactamente lo que nos dicen en la receta. Vamos añadiendo harina hasta justo el punto en que no se nos pegue, en ese momento estiramos con el rodillo, dando forma redondeada. No hace falta que quede perfecto, simplemente redondeada. Darle un grosor de un centímetro más o menos, pero podéis jugar con él, y cambiará totalmente el resultado final, teniendo siempre en cuenta que cuanto más grosor le demos, más tiempo de horno habrá que darle.
- Cortamos con un cuchillo por la mitad, y de cada mitad sacamos triángulos, que tampoco tienen que ser iguales. Así todo el mundo sabrá que lo hemos hecho nosotros. Queda muy rústico y muy bonito.
- Colocar los triángulos, con ayuda de una espátula en la bandeja de horno, con papel sulfurizado y hornear de 10 a 15 minutos. Cuando veáis que se dora un poco, sobre todo por los extremos, sacarlo. Comprobar que la parte que pega al papel está dorada y estarán listos.
- Mientras, preparamos la glasa, como hemos hecho en otras ocasiones. Zumo de naranja colado, la ralladura y vamos añadiendo el azúcar glass, hasta obtener una consistencia líquida pero con el cuerpo suficiente para que al echarlo sobre nuestros scones fríos no se caiga por todos lados.
- Espolvorear unos trocitos de almendras cortaditas en brunoise: cuadraditos muy pequeños.
- Dejar que la glasa endurezca y comer.
Nota: es una masa sorprendente. El aspecto es de algo duro y crujiente, pero al morder te encuentras con un bizcochito jugoso y blandito, riquísimo. Realmente ha sido un descubrimiento.
Otra nota: los 'scones' son panecillos individuales, tanto redondos, cuadrados, como triangulares, muy utilizados en toda la zona anglosajona, incluída Nueva Zelanda.
Otra más: os dejo el link de la publicación donde tengo medias y equivalencias, por si os hace falta para esta receta, porque quizás con lo de las cucharadas tengáis problemas. Pero he de deciros que con este tipo de galletas, salvo los ingredientes principales, el resto son un poco al gusto de quien los hace, es decir, se puede poner un poquito más de zumo, o de mantequilla, porque es realmente difícil que no salga. Recordaros también que c.c es cuchara de café y c.s. cuchara sopera.
http://misbollosyotrascosas.blogspot.com.es/2012/11/terminos-de-pasteleria-y-panaderia.html
Si os han gustado estos sencillos panecillos, dejar un comentario,y si os encantan suscribiros!!!
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