Ingredientes:
Para la masa:- 500 g. de harina de fuerza
- 125 g. de azúcar
- 2 huevos medianos
- 50 cl. ó 4 c.s de leche tibia (aprox.)
- 50 c.l. de agua (aprox.)
- 5 g. de sal
- ralladura de una naranja, o de media naranja y medio limón
- 1 c.c. de agua de azahar
- 1 c.c. de ron negro
- 20-25 g. de levadura fresca/prensada de panadero (dependerá de la fuerza de vuestra harina)
- 125 g. de mantequilla en pomada
- 100 g. de azúcar granillo, nuestro azúcar bolado
- 100 g. de nuestras maravillosas frutas confitadas variadas
- 100 g. de almendras sin tostar, en láminas o en granillo, a vuestro gusto
- una sorpresa envuelta en film y una haba (si la encontráis en el mercado)
Elaboración para amasado a mano:
- Tamizamos la harina sobre la superficie de trabajo y separamos una tercera parte.
- Formamos un volcán con la menor cantidad y le colocamos en el centro la levadura disuelta en el agua tibia. Amasamos hasta que podamos formar una bola. Preparamos un bol grande con agua templada, no muy caliente, unos 25ºC. estará bien e introducimos nuestra masa de levadura, y la dejamos hasta que suba a la superficie. También podemos hacer este prefermento dejando la bola de masa en un bol tapado con un paño o film a una temperatura cálida, por ejemplo en el horno, hasta que doble de volúmen, pero el primer método es más rápido.
- En el centro del volcán grande de harina introducimos el resto de los ingredientes, excepto la mantequilla. Amasaremos hasta conseguir una masa homogénea y lisa, alrededor de diez minutos de amasado fuerte será suficiente.
- Será el momento de incorporar nuestra masa levada entera, y la mantequilla, mejor poco a poco.
- Seguimos amasando, no menos de otros diez minutos hasta que obtengamos una bola de masa lisa y uniforme.
- Hacemos una bola bien cerrada en la parte de abajo, la colocamos en un bol grande y la tapamos con un paño hasta que doble de volúmen. Esta parte del proceso dependerá fundamentalmente de la temperatura. A mí me gusta hacer este tipo de masas de un día para otro y, ahora en invierno, las dejo levar en el tendero toda la noche, es decir, preparo la masa por la tarde. Pero si queréis hacerlas en el mismo día, el truco del horno precalentado a unos 50ªC. durante 5 minutos, e introducir la masa en él hasta que duplique de tamano, funciona bien. No debéis tocar la masa, solo levantar el trapito y observar si leva, aumenta de tamaño, adecuadamente. Pero necesitaréis unas tres o cuatro horas.
- Esta última operación puede hacerse una vez más, pero yo normalmente lo hago una única vez.
- Una vez estemos seguros que ha subido bien, volcamos el bol y ayudamos a que la masa caiga sobre la mesa de trabajo enharinada, sin introducir los dedos para que no se rompa. La volvemos a trabajar unos minutos para que expulse el aire. Le damos forma de bola y la dejaremos reposar sobre la mesa de trabajo unos minutos.
- Introducimos el dedo índice en el centro de la bola y después con las dos manos le iremos dando forma, intentando que tenga la misma cantida por todo el círculo. Con esta masa y para sólo un roscón debería tener unos 30-40 centímetros de diámetro.
- Introducir la sorpresa y el haba levantando ligeramente la parte que no se ve y cerrar el pequeño orificio. Colocarlo sobre la lata de horno con dos hojas de papel sulfurizado, porque rezuma un poco, aplastarlo ligeramente y dejar fermentar hasta que doble de volúmen. Podéis poner en el centro una bola grande de papel albal para que no se cierre el agujero.
- Una vez haya doblado el volúmen, lo pintaremos con huevo y lo decoraremos con el azúcar bolado, las frutas confitadas y las almendras, a nuestro gusto.
- Debemos cocer este tipo de masas a horno de 200ºC. durante unos quince minutos. Sacar, dejar enfriar y despegar del papel cuando haya enfriado.
¿Cuántos roscones podemos formar con esta cantidad de masa?
- uno grande de un kilo, con los 30-40 cm. de diámetro que indico en la receta
- dos medianos de medio kilo, con 20-25 cm. de diámetro
- cuatro pequeños de cuarto de kilo, con 15 cm. de diámetro
Nota: Este es el Roscón que nos enseñan en la Escuela de Hostelería y lo amasamos a mano. La miga es algo compacta pero muy rica de sabor y aguanta muy bien un par de días. También lo podéis congelar en el último amasado, que es lo que hacen en las pastelerías, para hornearlo un ratito antes de comerlo, que es como realmente está delicioso.
Otra nota: animaros a hacerlo ahora que ya no tenéis la presión de que salga bien para las visitas. Hacerlo para merendar un domingo como hoy, con los niños de la casa, si los hay, o por el simple gusto de practicar este tipo de masas tan nuestras y tan ricas.
Otra más: esta entrada se la dedico a mi amiga del alma, mi hermana mayor
Este es uno de los dos roscones que quiero subir esta semana, animaros y suscribiros al blog para que no olvidéis leer las recetas
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