Ingredientes:
- 4 huevos medianos
- 125 g. de aceite
- 200 ml. de nata de repostería, con un mínimo del 35 % de grasa
- 200 g. de chocolate al 55% de cacao, en trocitos pequeños
- 350 g. de harina común
- 200 g. de azúcar, quizá algo menos si no te gusta muy dulce
- 150 g. de mermelada de naranja y genjibre
- ralladura de una naranja
- 1 c.c. de genjibre rallado
- 1 sobre de levadura química (en repostería lo llamamos impulsor)
- 2 c.c. de cacao en polvo, sin azúcar
- una pizca de sal
- aceite y cacao en polvo para untar el molde elegido
Elaboración:
- Lo primero que haremos será deshacer el chocolate. Yo normalmente lo hago en el microondas, en modo descongelación. Lo vigilamos cada 30 segundos, y debemos tener la precaución de que no se derrita del todo. Cuando veamos que empieza a estar blando, aunque haya trozos que no lo estén, removiendo con la espátula conseguiremos que con su propio calor, derrita el resto. No debe calentarse, y por supuesto, tener cuidado de que se os queme. También se puede hacer al baño maría, teniendo cuidado de que el agua no suba mucho la temperatura y de que no toque el fondo del bol donde pongamos el chocolate; simplemente el vapor será suficiente para derretirlo.
- Batir los huevos con el azúcar, hasta que obtener una mezcla espumosa y blanquecina. Si conseguimos que doble el tamaño, mejor, quedará más esponjoso.
- Añadiremos la nata y seguir batiendo.
- Sin dejar de remover, a hilo fino, iremos añadiendo el aceite.
- Después incorporamos el chocolate, el cacao, y la mermelada. Lo batimos para que se integre bien. En este momento tenemos un batido de un precioso color, al que daremos cuerpo con la harina.
- Tendremos mezclada la harina, el impulsor químico y la pizca de sal y lo tamizaremos sobre nuestro batido. Lo removemos bien, incluso con las varillas, pero también podemos hacerlo con una espátula, porque en esta parte no hace falta batir, solo conseguir que la masa se integre bien.
- Habremos calentado el horno a unos 180ºC.
- Untamos nuestro molde, yo en este caso he utilizado uno de plum cake, pero rígido, no de silicona, porque la masa tiene bastante peso, y seguramente se abriría, con un chorrito de aceite, que repartiremos por todas las paredes, y espolvoreamos cacao en polvo, no harina. El truco es estupendo, porque no queda blanquecino al desmoldar.
- Volcamos nuestra masa y lo metemos al horno, al menos 45 minutos, pero ya sabéis cada uno debe saber qué tiempo necesita. Siempre son estimaciones.
Otra nota: La mermelada de naranja la podéis sustituir por cualquier otra, casera o comprada, que tengáis en casa, de fresa, frutos rojos, melocotón. Yo tenía la de naranja recién hecha de ayer y no he podido controlarme... es un bizcocho delicioso y jugoso.
Para Sara con todo mi cariño.
ResponderEliminar